Este tejido se teje mediante una técnica de tejido denominada Karami-Ori, y se caracteriza por su transparencia. Usando seda y lamé dorado para los hilos de la trama, un patrón de cuadros se expresa en un tejido jacquard, dándole una apariencia texturizada pero con la misma transparencia en todas partes. Se tiñe de negro después de tejer.